Ella

Ella


¿Por qué te has ido? ¿Por que te escapas a los
astros fugandote en las nubes del destierro?
¿O es a las cumbres de los montes donde has ido?
Acaso te hallas en el claro verdor de la campiña,
en praderas distantes gozando del suave
amanecer del alba tropical? Alli donde tu
lindo pie camina dichoso entre las flores.
Donde tu voz el entorno acaricia.
Donde alumbran tus ojos todo lo que miran.

Allí donde tu aliento perfuma la azucena
y, tus senos por mano divina esculpidos,
son rivales de erectas colinas.
Quizás sea en el mar donde te encuentras,
perdida en medio del abismo.
O, es en la espuma adonde estás serena,
tal vez besando arenas que fueron encendidas
por el beso candente del sol resplandeciente?
¡Regresa!

Te espera la noche rumorosa.
La brisa te llama con acento doliente.
La playa te añora con tristeza.
El mar rugiente demanda tu presencia.
El oleaje brama por tu cuerpo desnudo.
El viento gime, las aves ya no vuelan.
Los pájaros no cantan, los ríos enmudecen.
¡Dime! ¿Por qué te has ido?
¡Devuélveme a mí mismo!
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