La noche oscura

(Metáfora)

Todavía recuerdo cuando aquella noche,
en campo abierto, se detuvo mi coche.
Se apagaron las luces, todo quedó a oscuras.
Nunca pensé que iba a ser una noche de aventuras.
Sólo sé que de pronto un zumbido creciente
me hizo mirar hacia atrás - vi que velozmente
se acercaba un auto azul que se paró a mi lado.
¡Eras tú! ¡Me dejaste pasmado!

Tanto alumbraba tu resplandor la noche oscura
que por un momento dudé de mi cordura.
Te pregunté si eras luz disfrazada de mujer.
Te echaste a reir con muestras de placer.
Después de examinar mi coche decidimos
que debía irme contigo - así lo hicimos.
Para hallar un mecánico tiempo habría mañana.
A tu lado esperaba que fuera una semana.

Amándote esa noche fallecí de placer.
Desde entonces te llamo y no quieres responder.
Lo más que siento es no poder jurarte
que mi muerte en tus brazos fue una obra de arte.
Todo lo que en mi vida había de inasible
esa noche contigo se hizo posible.
Y, sin más que decir y sin ningún barniz,
del mundo de ficciones me despido feliz.
****